jueves, 29 de marzo de 2012

Nacionales: Amenaza Moyano con desabastecer los súper

Del enfrentamiento retórico a la acción directa. La disputa entre Hugo Moyano y la Casa Rosada se acentuó después del anuncio para mañana de una huelga con movilización del sindicato de camioneros ante el inminente cierre de la cadena de supermercados Eki y la incertidumbre sobre el futuro de sus 2300 empleados.
 
 
 
 
Será la segunda medida de protesta que encabeza el gremio del líder de la CGT durante la presidencia de Cristina Kirchner, aunque de mayor impacto que la primera. El 30 de enero los camioneros de la rama de correos de casi todo el país habían parado por el conflicto en la Patagonia con una contratista de la gasífera Camuzzi.
Desafiante, Pablo Moyano, número dos en el escalafón jerárquico de los camioneros, convocó para mañana a un paro en la rama de logística y distribución, lo que afectará el abastecimiento y el servicio de casi todos los supermercados de la Capital Federal y el Gran Buenos Aires.
La escalada de tensión entre el jefe camionero y el Gobierno está contextualizada por la elección de autoridades que habrá el 12 de julio próximo en la CGT. Si bien no hubo un respaldo abierto y directo, el kirchnerismo ya le dio su apoyo al metalúrgico Antonio Caló para desbancar a Moyano de la central obrera.
La medida de fuerza de los camioneros contemplará mañana una marcha a la sede del Ministerio de Trabajo, blanco de las críticas sindicales por la indefinición del caso Eki.
Desde la empresa Eki intentaron ayer enviar señales de tranquilidad. Esta semana se cerraría el acuerdo con Carrefour para que se haga cargo de las 136 sucursales de la cadena y de sus 2300 empleados. "El punto uno de la negociación es la continuidad de las fuentes de trabajo. El personal entra sí o sí en la transacción", aseguró uno de los representantes de Eki, una firma que está en pleno proceso concursal, con una deuda de $ 280 millones, y que este año ya cerró 20 locales.
En el sindicato de camioneros dijeron no estar al tanto de los avances de la negociación entre Eki y Carrefour. Por eso, hasta anoche no se analizaba levantar la medida de fuerza si es que surgía una solución para los 2300 trabajadores, quienes en su mayoría están agrupados en el Sindicato de Empleados de Comercio (SEC).
El referente del SEC, Antonio Cavallieri, en cambio, se mostró optimista por una solución del conflicto. "Desde un principio me diferencié de Moyano porque si no Eki se iba a la quiebra y perdíamos todos. Pronto se cerrará el acuerdo con Carrefour, que tomará a los trabajadores", señaló el dirigente mercantil.
A los 2300 empleados de Eki se les adeudan dos meses de salario y el pago de los aportes previsionales y de las asignaciones familiares. Según los empresarios que administran la cadena, con la venta a Carrefour se regularizará la situación de todo el personal.
Por el inminente cierre de Eki, manifestantes del gremio de camioneros protestaron hace dos semanas en la sede laboral. Por entonces, estaba vigente la conciliación obligatoria. Esto motivó la reacción del ministro de Trabajo, Carlos Tomada, que rechazó la medida de Moyano y criticó su metodología de "cortes y amenazas". La réplica sindical fue inmediata: Pablo Moyano calificó de "caradura" al funcionario y advirtió sobre posibles desabastecimientos en los supermercados.
Otros reclamos
Ayer, el hijo del líder de la CGT justificó nuevamente la protesta por Eki y dijo que el malestar se extiende a otros gremios. "Muchas organizaciones están teniendo problemas y no sé cómo va a terminar. No hay insumos y falta mercadería. Esto lleva a la suspensión del personal y a la quita de las horas extras. Si a los trabajadores les tocan un peso del bolsillo, van a terminar reaccionando", dijo Pablo Moyano en diálogo con Radio Mitre.
El conflicto de Eki es apenas una cuenta más del collar de reclamos que Moyano considera pendientes por parte del Gobierno. Hace dos días, con el aval del consejo directivo de la CGT, el jefe camionero exigió una respuesta de la Casa Rosada a sus pedidos por una mejora salarial, una reforma impositiva y por la millonaria deuda que el Estado mantiene con las obras sociales sindicales.
"La dilatación y la falta de respuesta por parte del Gobierno generan malestar. No advierto un horizonte de menor conflictividad", opinó el moyanista Juan Carlos Schmid.
CANILLITAS RECLAMAN POR CLAUSURAS
El Sindicato de Vendedores de Diarios y Revistas denunció al gobierno de la ciudad de Buenos Aires por "la clausura injustificada de ocho quioscos". Omar Plaini, titular de los canillitas, amenazó con un paro y una movilización a la sede del gobierno porteño si no le dan una explicación válida..

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